La cuenta atrás ha comenzado. Del 9 al 23 de agosto, Paraguay se convertirá en el centro neurálgico del deporte juvenil del continente con la celebración de los Juegos Panamericanos Junior ASU 2025. Más de 4.000 atletas menores de 22 años, 41 países y 28 disciplinas dibujan el mapa de esta segunda edición que promete dejar huella en el calendario deportivo internacional.
Entre entrenamientos intensivos y sistemas de preparación compartidos entre países, algunos técnicos han observado cómo las nuevas generaciones buscan referencias más allá del rendimiento físico. Incluso fuera del terreno de juego, surgen anécdotas: desde aplicaciones móviles para controlar la nutrición hasta debates sobre si existe alguna casa de apuestas con pasaporte que pueda seguir legalmente el rendimiento juvenil en mercados internacionales. Una curiosidad que subraya la creciente profesionalización del entorno deportivo, incluso en categorías sub-23.
El evento, organizado por Panam Sports, se desplegará en varias sedes: el moderno Parque Olímpico Paraguayo en Luque será el eje principal, pero también habrá competencias en Encarnación, Ypacaraí y otras ciudades satélite. Natación, gimnasia, atletismo, lucha y judo se desarrollarán en la capital, mientras que las pruebas acuáticas y el triatlón tendrán sede en el sur del país. Todo apunta a una edición descentralizada, inclusiva y abierta al gran público.
Billetes para Lima y una cantera que mira al futuro
Más allá de la lucha por las medallas, los Juegos Panamericanos Junior de Asunción tienen un objetivo claro: entregar plazas directas para Lima 2027. Los campeones de cada disciplina que forme parte del programa oficial obtendrán el billete automático. Esto transforma la competición en algo mucho mayor: una verdadera eliminatoria de alto nivel que marcará el futuro del deporte panamericano.
ASU 2025 estrenará nuevas disciplinas: rugby 7, hockey hierba, golf, esquí acuático y baloncesto 5×5 se sumarán a los ya consolidados como ciclismo, taekwondo o boxeo. El programa es variado y exigente, pensado para poner a prueba tanto la técnica como la resistencia de los atletas.
En cuanto a organización, Paraguay ha invertido fuerte: remodelación de instalaciones, mejoras en movilidad, desarrollo de una Villa Panamericana provisional y sostenibilidad como eje estratégico. Además, se ha previsto la reutilización de estructuras para programas educativos una vez finalizado el evento.
En el plano tecnológico, se estima una cobertura en directo de más de 1.000 horas, con señales simultáneas en Panam Sports Channel, YouTube, TikTok y otras plataformas sociales. También habrá una app oficial para seguimiento en tiempo real, resultados y programación.
Igualdad, promesas emergentes y ambiente de fiesta
Las expectativas deportivas están al alza. Figuras como la nadadora colombiana Sofía Martínez, el velocista brasileño Thiago Luz o el lanzador argentino Lautaro Báez ya despuntan como promesas a seguir. Muchos de ellos sueñan no solo con Lima 2027, sino con escalar hasta Los Ángeles 2028 o París 2032.
Uno de los puntos fuertes de la edición será la igualdad de género. Panam Sports ha garantizado paridad total en las pruebas, además de promover la presencia femenina en cuerpos técnicos, árbitros y comités organizadores. La diversidad también se verá reflejada en la cobertura mediática, con narraciones inclusivas y accesibilidad para personas con discapacidad visual o auditiva.
Paraguay, como anfitrión, no quiere quedarse atrás. Su delegación participará en casi todas las disciplinas y buscará aprovechar el apoyo local para dar la sorpresa. Desde hace semanas, las calles de Asunción están decoradas, los voluntarios entrenan y los medios nacionales calientan motores con entrevistas y reportajes.
Esta segunda edición de los Juegos Panamericanos Junior llega con fuerza. Más madura que la primera (Cali 2021), más ambiciosa en su alcance, y con un enfoque integral que combina alto rendimiento, sostenibilidad y formación de nuevos talentos. ASU 2025 no es solo una fiesta del deporte: es un paso firme hacia el futuro.
Conclusión: talento joven en el corazón de América
Los Juegos Panamericanos Junior ASU 2025 se perfilan como una plataforma clave para el desarrollo deportivo continental. Paraguay se ha preparado a conciencia para mostrar que puede ser mucho más que un anfitrión ocasional. Con talento emergente, estructura renovada y una visión clara de futuro, Asunción aspira a dejar huella. Y si algo está claro, es que esta generación de atletas viene dispuesta a competir con el corazón por delante… y los ojos puestos en Lima y más allá.

