El panorama económico cubano ha experimentado transformaciones significativas en el último lustro, marcado por una evolución en la percepción y el papel del sector privado. Las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) han emergido con potencial para contribuir al desarrollo, a pesar de operar bajo condiciones desafiantes. Inicialmente vistas con desconfianza y clasificadas como un «mal necesario» por el gobierno, las mipymes se han establecido como una parte importante del tejido empresarial cubano, aunque todavía enfrentan restricciones que limitan su crecimiento. 

La regulación restrictiva y la burocracia continúan siendo obstáculos para estas empresas, afectando especialmente a sectores innovadores como el desarrollo de software. Las mipymes privadas deben cumplir con requisitos administrativos que restringen su creatividad, limitan sus actividades y las obligan a operar en condiciones desventajosas frente a las empresas estatales. Sin embargo, a pesar de estos retos, algunas mipymes han demostrado que es posible desarrollar productos tecnológicos competitivos, adaptados tanto al mercado nacional como al internacional. 

En este desafiante contexto, las mipymes tecnológicas destacan no solo por su capacidad para generar empleos y valor agregado, sino también por su contribución a modernizar sectores estratégicos de la economía. Su enfoque en la innovación les ha permitido superar barreras estructurales y posicionarse como actores clave en un campo que requiere conocimientos técnicos avanzados, creatividad y adaptabilidad.

Las empresas privadas tecnológicas en particular enfrentan un doble desafío: operar dentro de un mercado interno con severas limitaciones y competir con empresas extranjeras mejor posicionadas. Sin embargo, su creatividad y capacidad para adaptar soluciones tecnológicas a las necesidades específicas del contexto cubano les han permitido consolidarse como un ejemplo de resiliencia y visión empresarial. Estas empresas no solo generan ingresos, sino que también fomentan el desarrollo de talento joven en un sector con alta demanda global. 

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En medio de este escenario, surge una pregunta crucial: ¿cómo garantizar que el potencial de estas mipymes se aproveche plenamente? La reforma integral de la economía cubana debe incluir medidas que no solo reduzcan la burocracia, sino que también incentiven la competitividad y apoyen la innovación tecnológica. A través de políticas más inclusivas, estas empresas privadas podrían desempeñar un papel aún más destacado en la diversificación de la economía y la generación de oportunidades para toda la población. 

En este artículo, exploraremos el caso de tres mipymes tecnológicas que, a pesar de las limitaciones estructurales y regulatorias, han logrado desarrollar software competitivo «Made in Cuba».

Guajiritos, innovación y tecnología desde Cuba para el mundo

Guajiritos se convirtió en la primera mipyme privada aprobada en el país y la primera inscrita en la Cámara de Comercio. Con más de una década de experiencia y un equipo que supera los 60 profesionales, esta empresa ha completado más de 300 proyectos en sectores clave como la educación, salud, turismo, transporte y telecomunicaciones.

La oferta de servicios de Guajiritos es diversa y altamente especializada. Entre sus principales líneas se encuentran el desarrollo de software a medida, diseño UX/UI, marketing digital, servicios en la nube y la producción de audiovisuales. Destaca también por la creación de sistemas de distribución global (GDS), plataformas diseñadas para automatizar procesos de gestión, comercialización y distribución de servicios, con capacidad para integrarse a otros sistemas dentro y fuera de Cuba.

En el sector del turismo, Guajiritos ha desarrollado herramientas específicas como GDS para la gestión de reservas y servicios, y plataformas de tiendas virtuales que facilitan el acceso a productos y servicios de manera integrada y eficiente.

Dofleini, transformación digital en sectores clave de la economía

Dofleini fue otra de las primeras mipymes privadas registradas en Cuba. Con más de 10 años de experiencia y un equipo multidisciplinario de 50 profesionales, este emprendimiento,  especializado en desarrollo de software y consultoría informática ha demostrado su capacidad para liderar proyectos que impulsan la transformación digital en sectores clave de la economía.

Foto: tomada del sitio oficial de Dofleini

Una de sus contribuciones más destacadas ha sido el desarrollo de la Plataforma de Actores Económicos (PAE), una herramienta para la gestión de solicitudes de mipymes y cooperativas no agropecuarias. Este sistema integra información de instituciones como el Banco Central de Cuba y el Ministerio de Justicia. Además, su apuesta por productos propios como la Guía Cubana de Negocios, un directorio empresarial con más de 370,000 registros, evidencia su compromiso con el fortalecimiento del ecosistema empresarial cubano.

La cartera de servicios de Dofleini abarca desde la creación de software personalizado hasta la modernización de plataformas existentes. Sin embargo, su innovación no se detiene ahí. Con iniciativas como DFL Portales Express, ha democratizado el acceso a sitios web profesionales, permitiendo que pequeños negocios construyan sus portales en cuestión de días, a bajo costo y con altos estándares de seguridad.

El comercio electrónico es otra de las áreas estratégicas de Dofleini. Su plataforma DFL ecommerce ofrece dos modalidades adaptadas a diferentes tipos de negocios: BazarQva, ideal para pequeños emprendedores que necesitan una tienda virtual con pagos desde el exterior, y una versión más robusta para empresas con altos volúmenes de venta, con funcionalidades avanzadas como la gestión de multialmacenes y la integración con proveedores. Ambas opciones reflejan la capacidad de la empresa para anticiparse a las necesidades del mercado y responder con soluciones efectivas.

Avangenio, a la vanguardia en inteligencia artificial

Fundada por un grupo de emprendedores apasionados por la tecnología, esta mipyme ha trascendido las fronteras nacionales, posicionándose como un actor clave en el desarrollo de software y la transformación digital.

Con más de 15 años de experiencia acumulada y un equipo multidisciplinario altamente especializado, Avangenio se enfoca en ofrecer soluciones informáticas personalizables y escalables que impactan positivamente en los sectores donde opera. Desde su creación, la empresa ha ejecutado más de 200 proyectos, alcanzando presencia en tres continentes y construyendo una cartera con 35 clientes internacionales.

El portafolio de Avangenio incluye servicios integrales que abarcan desde la consultoría hasta la implementación y soporte de soluciones tecnológicas. Entre sus productos destacan:

  1. “La Papeleta”: Una aplicación móvil diseñada para la promoción y venta de eventos culturales en Cuba.
  2. “Avangtur”: Una plataforma dedicada a la organización de eventos turísticos y la gestión de alojamientos y circuitos.

Además, Avangenio ha incursionado en áreas de vanguardia como la inteligencia artificial, el blockchain, la automatización y la nube. Su metodología DevOps y el uso de tecnologías de última generación garantizan la calidad y escalabilidad de sus desarrollos, mientras que sus certificaciones internacionales, incluyendo AWS y Microsoft, respaldan su capacidad técnica.

En un mundo donde la transformación digital es indispensable para el éxito empresarial, estas 3 mipymes tecnológicas cubanas han sido capaces de convertir desafíos en oportunidades. Con una trayectoria sólida, un equipo excepcional y una visión clara hacia el futuro, estas empresas demuestran que la innovación no tiene límites geográficos.