La cuenta regresiva ha comenzado en Canadá, ya que las ciudades de Toronto y Vancouver se preparan para albergar uno de los eventos deportivos más importantes: la Copa Mundial de fútbol 2026. Con poco más de dos años para el inicio del torneo, las autoridades locales y provinciales se encuentran inmersos en una carrera contrarreloj para garantizar que ambas urbes estén listas para recibir a miles de fanáticos y atletas de todo el planeta.

Desde renovaciones de estadios multimillonarias hasta estrictas medidas de seguridad, los preparativos ya están en marcha y prometen dejar un legado duradero en las dos ciudades anfitrionas.

Inversiones récord y retos logísticos sin precedentes

La organización de un evento de la magnitud de la Copa Mundial de la FIFA no es tarea sencilla, y los gastos asociados reflejan la complejidad del desafío. En Toronto, se estima que el costo de albergar seis partidos, incluido el primer juego de la selección canadiense en suelo patrio, ascenderá a la astronómica cifra de $380 millones, un aumento significativo de $80 millones en comparación con las previsiones iniciales de 2022.

Por su parte, Vancouver enfrenta un desafío aún mayor, con estimaciones que sitúan los costos de albergar siete partidos entre $483 y $581 millones, más del doble de lo proyectado hace dos años.

Remodelaciones de estadios y mejoras de infraestructura a gran escala

Una de las prioridades más urgentes es la remodelación de los estadios que albergarán los partidos. En Toronto, el histórico BMO Field, hogar actual del Toronto FC, recibirá extensiones en ambos extremos para aumentar su capacidad a 45,736 asientos, además de cambiar temporalmente su nombre a «Toronto Stadium» por regulaciones de marketing de la FIFA.

Mientras tanto, en Vancouver, el emblemático BC Place Stadium, construido en 1983, pero remodelado para los Juegos Olímpicos de Invierno de 2010, recibirá actualizaciones como elevadores más grandes, baños de género neutro y mejoras en la conectividad Wi-Fi, además de la instalación de una cancha de césped natural.

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Seguridad y logística: desafíos clave para garantizar un evento sin contratiempos

Más allá de las renovaciones físicas, la seguridad y la logística son aspectos cruciales que requieren una cuidadosa planificación y una coordinación sin precedentes. Aproximadamente un tercio del costo total en Toronto, alrededor de $126 millones, se destinará a servicios policiales y medidas de seguridad, mientras que en Vancouver se prevé la coordinación de más de 40 departamentos y agencias federales, incluyendo servicios fronterizos, inteligencia y visas de trabajo, para garantizar un evento sin contratiempos.

Beneficios económicos y legado a largo plazo: la recompensa por la inversión

A pesar de los elevados costos, las autoridades de ambas ciudades confían en que los beneficios económicos y el legado a largo plazo compensarán con creces la inversión realizada. Se estima que la Copa Mundial generará más de 3,500 empleos directos en Toronto y atraerá a 300,000 visitantes de fuera de la ciudad, lo que se traducirá en un impulso de $393 millones al producto interno bruto de la ciudad y $456 millones para la provincia de Ontario. En Vancouver, se espera que el evento atraiga a 350,000 fanáticos y genere más de $1,000 millones en ingresos por turismo en los cinco años siguientes al torneo.

Oportunidad para el desarrollo turístico y la marca ciudad en el escenario global

Más allá de los beneficios económicos directos, la Copa Mundial de la FIFA 2026 representa una oportunidad única para promocionar a Toronto y Vancouver como destinos turísticos de primer nivel en el escenario global.

Las autoridades locales esperan que el evento ayude a fortalecer la marca de ambas ciudades y atraiga inversiones en infraestructura turística, como la construcción de nuevos hoteles, restaurantes y centros comerciales. Además, la exposición mediática sin precedentes que conlleva un evento de esta magnitud podría impulsar el turismo a largo plazo y posicionar a las dos ciudades como puntos de referencia para futuros eventos deportivos internacionales.

Legado deportivo y compromiso con la sostenibilidad

Además de los beneficios económicos y la promoción de la marca, las autoridades de Toronto y Vancouver han expresado su compromiso con dejar un legado duradero en el ámbito deportivo y la sostenibilidad.

Se espera que las renovaciones de los estadios y la construcción de nuevas instalaciones deportivas fomenten la práctica del fútbol y otros deportes en las comunidades locales, inspirando a las generaciones futuras a adoptar un estilo de vida activo y saludable. Asimismo, ambas ciudades han implementado medidas para minimizar el impacto ambiental del evento, como la utilización de energías renovables y la reducción de residuos.

Con renovaciones de estadios de vanguardia, medidas de seguridad reforzadas y planes de desarrollo turístico ambiciosos, ambas ciudades se encuentran en la recta final de sus preparativos para ofrecer una experiencia inolvidable a los visitantes y dejar una huella en la industria del deporte y el turismo a nivel mundial.