Una rápida búsqueda en Internet sobre los “mejores destinos en Cuba” nos devolverá, invariablemente, resultados similares. La Habana, Varadero, Trinidad, Viñales y los cayos al norte del país aparecerán siempre entre las primeras sugerencias. Las playas espectaculares, así como la posibilidad de conocer la capital y otras ciudades patrimoniales resultan grandes atractivos. Para aquellos que busquen salirse de las rutinas turísticas tradicionales aquí compartimos cinco destinos en Cuba no tan conocidos; pero que podrían dejarte boquiabierto, por la belleza de sus paisajes y las actividades que puedes realizar allí.
El Yunque de Baracoa
Baracoa fue la primera villa que fundaron los españoles en Cuba. La ciudad tiene más de 500 años de historia y, sin dudas, es uno de los lugares más llamativos del país. Sus impresionantes montañas, ríos y fauna endémica atraen mucho a los amantes del turismo de naturaleza. Entre los sitios imperdibles está El Yunque.
Esta es una montaña de cima aplanada, de 575 metros de altura, ubicada a solo 10 kilómetros de la ciudad. Subir hasta su punto más alto es una aventura. Los más intrépidos podrán bañarse en el río Duaba. En el recorrido es posible apreciar diferentes tipos de mariposas, mamíferos y aves, entre ellas el tocororo. Las vistas desde la cima son impresionantes.
Cristóbal Colón quedó deslumbrado al ver por primera vez El Yunque y así lo describió en su diario de navegación: «y al cabo de ella de la parte Sueste un cabo en el cual hay una montaña alta y cuadrada que parecía isla».
Península de Guanahacabibes
En el extremo más occidental está la Península de Guanahacabibes, otro de los destinos en Cuba para hacer ecoturismo. Este es un sitio paradisiaco, alejado de las ciudades y considerado por la UNESCO como Reserva de la biosfera.
Menos de 100 personas habitan de manera permanente en las más de 50 mil hectáreas de tierra y mar. Los amantes del avistamiento de aves pueden disfrutar de 200 especies que buscan refugio en la península. Mientras, los que gustan del buceo tienen a su disposición 50 puntos de inmersión en los que apreciarán un ecosistema marino diverso, con grandes arrecifes coralinos, donde resalta el coral negro.
Si eres de los que prefiere tocar el pasado, también podrás deleitarte, ya que en ese sitio existen restos de más de 200 naufragios, sobre todo de barcos españoles. En los paseos y caminatas podrás apreciar desde bosques vírgenes hasta grandes extensiones de manglares. Entre las excursiones más llamativas está la que te lleva al Cabo de San Antonio, donde se encuentra el faro Roncali, construido a mediados del siglo XIX.
Uno de los momentos imperdibles de la visita a Guanahacabibes es ver las tortugas marinas. Entre mayo y septiembre llegan hasta las costas diferentes especies, desde la caguama, hasta el carey y la tortuga verde. En las dunas desovan y, en este período, científicos, voluntarios y visitantes cuidan la anidación.
El Nicho
En el Parque Natural Topes de Collantes está El Nicho. Ubicado a 440 metros sobre el nivel del mar, en la Sierra del Escambray, al centro del país, este sistema de cascadas atrae cada año a miles de visitantes cubanos y foráneos.
Bañarse en esas aguas es una experiencia inolvidable. Además, antes de llegar a ese momento podrás disfrutar de un recorrido, a pie, por un sendero natural de 1,5 kilómetros, que llaman el “Reino de las aguas”, rodeado de una exuberante flora y fauna. Allí hay más de 60 plantas endémicas y los amantes a la fotografía tienen la posibilidad de tomar instantáneas del tocororo, la multicolor ave nacional de Cuba.
Uno de los lugares más atractivos en esa zona es la cascada “El negro”, donde cae el agua desde una altura de 30 metros. No debería faltarte un baño en la “Poceta de los enamorados”. Cuenta una leyenda local que, si una pareja se baña junta, en ese sitio, la relación durará para siempre. También podrás bañarte en la cascada del “Desparramado” y en la “Poceta de cristal”.
Cayo Saetía
Los cayos de Cuba, al norte y sur del país, están entre los destinos favoritos de los visitantes. En PanamericanWorld ya les contamos sobre los cayos que consideramos más impresionantes, para aquellos que buscan el turismo de sol y playa. Esta vez compartimos la historia de un lugar suigéneris: Cayo Saetía, una isla de 42 kilómetros cuadrados de extensión, al norte de Holguín, donde puedes realizar un safari.
El viaje a Cayo Saetía se realiza en catamarán o por carretera. En ese fabuloso lugar podrás desde bañarte en playas vírgenes hasta montarte en un jeep y moverte junto a búfalos, antílopes, avestruces y cebras que viven libremente en el lugar.
Cabo Cruz
Este lugar quizás sea de los destinos turísticos menos conocidos en Cuba; pero lo incluimos en nuestro listado, porque ofrece a los visitantes una impresionante vista de terrazas marinas, así como la posibilidad de visitar un faro centenario, desde donde se puede apreciar el Parque Nacional Desembarco del Granma.
Cabo Cruz está en el extremo sur occidental de Cuba, en la provincia de Granma, a la entrada del Golfo de Guacanayabo. Cristóbal Colón descubrió este sitio, en 1494, y lo llamó “Cabo Cruz”, ya que el día en que lo visitó (3 de mayo) se celebra la Fiesta de las Cruces.
En Cabo Cruz los amantes de la fotografía submarina pueden capturar con su cámara imágenes de una barrera coralina que se extiende por 1.500 metros. Otro de los lugares a visitar es el Faro Vargas (actualmente conocido como Faro de Cabo Cruz), inaugurado en 1871. Su torre tiene una altura de 32 metros y desde lo más alto se tiene una vista impresionante del paisaje de la zona.
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