La plataforma web CNET eligió los latinos más influyentes del mundo tecnológico en Estados Unidos en 2016. El listado incluye, entre otros, a un vicepresidente de software de Apple, dos ingenieras de la Agencia Espacial Estadounidense (NASA, por sus siglas en inglés), un director de ingeniería de Microsoft y varios cofundadores de startups.

El más joven apenas tiene 30 años y el mayor le dobla la edad. Algunos trabajan en realidad virtual y otros se dedican al diseño o a la investigación.

Pasión lejos de casa

Soledad Antelada nació en Argentina hace 38 años, pero creció en España y comenzó su carrera en ciberseguridad al otro lado del charco, en California (EE.UU.).

Hoy trabaja en uno de los laboratorios científicos más prestigiosos del mundo, el Lawrence Berkeley National Laboratory, en San Francisco. Y su función principal consiste en mantener el sitio libre de hackers.

Precisamente en la ciudad californiana es donde vive Eddy Cue, de 51 años, responsable de software en Apple, hijo de inmigrantes cubanos que llegaron a Estados Unidos en 1962. Cue es, según CNET «es uno de los ejecutivos más longevos y poderosos de la empresa mejor tasada del mundo».

Su homólogo en Microsoft, el porteño Diego Rejtman, se trasladó de Buenos Aires a Seattle para dirigir el departamento de ingeniería de software de la multinacional tecnológica.

Y asegura que «siempre amó la computación». Todos ellos tienen algo más en común que su origen hispano y su país de residencia: dicen sentir pasión por su trabajo.

A unos les costó más tiempo que a otros conseguirlo, pero hoy ocupan puestos de influencia en el mercado tecnológico estadounidense.

«A la vanguardia»

Este año se repiten algunos nombres, como el de la ingeniera venezolana Evelyn Miralles, quien lleva más de 20 liderando el programa de realidad virtual de la NASA.

Miralles, de 49 años, repite su inclusión en la lista porque «ha estado a la vanguardia de la tecnología del momento», explican desde CNET.

La ingeniera Christina Díaz -de padres mexicanos y criada en Los Ángeles, California- también trabaja en la agencia espacial estadounidense: se encarga de la misión Marte 2020 para la exploración del Planeta Rojo.

Y, aunque Miralles le dobla la edad, a Díaz los años no le restan talento. Fue nombrada una de las 10 mexicanas que están cambiando el país y el mundo por la revista Vanity Fair, y aspira a dirigir una misión en un futuro no muy lejano.

Otros cuatro venezolanos completan la lista.

Manuel Bronstein, de 41 años, es vicepresidente de producto de YouTube desde 2014, aunque antes pasó por Microsoft y por Zynga, donde trabajó como vicepresidente de producto desarrollando videojuegos sociales.

Y esa es la especialización de Carlos Domínguez, caraqueño de la misma edad emigrado a San Diego, quien se encarga de videojuegos móviles en Hasbro.

Pero hay más mujeres (este año 9 de 20, tres más que en 2015). La ingeniera Dioselín González, de 40, se encarga de realidad virtual en Unity Lab, y Lilian Rincón, a sus 36, diseña bots para Skype.

La costarricense Jennifer Argüello, de 39 años, trabaja en GitHub y se describe como una «ciberactivista».


Frances Colón.

Frances Colón, boricua de 42, trabaja para el Secretario de Estado de EE.UU. como asesora de ciencia y tecnología y lidera proyectos de colaboración entre Estados Unidos y Cuba, aunque en el pasado gestionó también programas entre Japón y América Latina.

La investigadora mexicana Selene Mota, de 40 años, quien trabaja en Samsung, y la emprendedora Paola Santana, de 30 años, fundadora de una exitosastartup de drones, también fueron citadas como latinas influyentes de este año.

Experiencia e innovación

No podían faltar los directivos de grandes corporaciones y los más experimentados.

El puertorriqueño Charlie Ortiz, con más de 30 años trabajando en su campo, dirige el laboratorio de inteligencia artificial en la multinacional tecnológica Nuance, con sede en Boston, Massachusetts, una de las pioneras en el desarrollo de software de reconocimiento de voz para aplicaciones y dispositivos domésticos.

El ingeniero químico de raíces mexicanas Jerry Bautista, de 60 años, cambió un rancho por la universidad de Stanford, en California, y hoy día está a la cabeza de la división de nuevos dispositivos de Intel, empresa a la que llegó hace 14 años.

Otro mexicano, Javier Verdura, de 47, trabaja en Tesla Motors dirigiendo el departamento de diseño de productos para crear autos eléctricos.

Y, también en el sector automovilístico, el argentino de 33 años Nicolás García Belmonte dirige la visualización de datos en Uber, un equipo formado por 15 personas que «analizan datos para predecir el mercado futuro», explica.

El español Íñigo Quilez tiene 36 y se dedica a la realidad virtual en Oculus, supervisando efectos virtuales de películas animadas.

Completan la lista otros dos jóvenes exitosos de apenas 30 años: el jefe de producto de LinkedIn para la búsqueda de talento, Eduardo Vivas, -un estadounidense afincado en Miami de madre cubana y padre colombiano, fundador de varias startups- y el bogotano John Freddy Vega, cofundador de Platzi, una startup que ofrece cursos en línea de programación y mercadeo.