Estados Unidos es el principal protagonista en la historia de los Juegos Panamericanos. Ese país ha ganado 15 de las 16 ediciones de la cita multideportiva más importante del continente y sus atletas han obtenido la impresionante cifra de 4173 medallas, de ellas 1861 de oro. En más de seis décadas de triunfos resulta muy complicado elegir solo cinco figuras; pero desde Panamerican World nos arriesgamos  al seleccionar este Top 5 de leyendas del deporte estadounidense.

Abraham Grossfeld. Gimnasia

Este gimnasta aparece en la segunda posición en la tabla histórica de máximos medallistas, con 21 preseas, una menos que otro gimnasta, el cubano Erick López.

Grossfeld compitió en tres Juegos Panamericanos: México, 1955, Chicago, 1959 y Sao Paulo, en 1963. En cada una de estas ediciones obtuvo al menos una presea, en diferentes modalidades; aunque el mayor dominio lo ejerció en la barra fija, pues ganó las tres veces que se presentó.

Además de los ocho títulos en las modalidades convencionales [manos libres (1), anillas (2), barra fija (3) y por equipos (3)], Grossfeld también brilló en competiciones descontinuadas, todas por equipos, en las que logró otras seis coronas.

Grossfeld participó en dos Juegos Olímpicos, Melbourne, en 1956 y Roma, en 1960. Después de su retiro se convirtió en entrenador del equipo olímpico de Estados Unidos, tanto de hombres como de mujeres. Con esta responsabilidad asistió a otras cinco citas estivales.

Lones Wigger. Tiro

Lones Wigger es una leyenda del tiro en Estados Unidos. Este coronel retirado del Ejército de su país compitió en cuatro Olimpiadas (1964, 1968, 1972 y 1980), en las que obtuvo tres preseas (dos de oro y una de plata). En los Panamericanos su envidiable puntería llamó la atención desde Sao Paulo, en 1963, donde conquistó su primer título, como parte del equipo estadounidense de la carabina de pequeño calibre.

Durante dos décadas, Wigger siguió brillando en los Panamericanos. Su despedida ocurrió en Caracas, en 1983, cuando tenía 46 años. El adiós fue por todo lo alto, porque añadió otras tres medallas de oro a su riquísimo historial (triunfó en la carabina de alto poder, 3×40 metros, individual y por equipos y también en la carabina de alto poder por equipos). En sus seis incursiones panamericanas, Wigger logró 18 preseas y 13 de ellas fueron de oro.

Terry Schroeder. Polo acuático

Terry Schroeder es una leyenda en el polo acuático. Su portentoso físico—que lo llevó a ocupar no pocos titulares mediáticos, porque medía dos metros—lo convirtió en líder de su selección, con la que ganó tres títulos Panamericanos, entre 1979 y 1987.

En ese período, Estados Unidos siempre superó a Cuba en el juego por la corona. En la cita de La Habana, en 1991, se produjo una enorme sorpresa, cuando los cubanos vencieron a los norteños en el último desafío e impidieron que Schroeder ganara su cuarta medalla en oro.

Este polista también sobresalió en Juegos Olímpicos, en los que ganó dos preseas plateadas, en Los Ángeles, 1984 y Seúl, 1988. Luego se convirtió en entrenador y dirigió al equipo nacional en la cita de Beijing, en 2008, donde cayó derrotado en el duelo por el título frente a Hungría y también estuvo en Londres, 2012.

En 1999, Terry Schroeder fue electo al Salón de la Fama del polo acuático en Estados Unidos.

Dorothy Richardson. Softbol

“Dot” Richardson es considerada una de las mejores softbolistas de todos los tiempos en Estados Unidos. Con la selección de su país obtuvo cinco medallas en Juegos Panamericanos y todavía es la atleta que mayor cantidad de preseas ha obtenido en deportes colectivos en la historia de estas citas multideportivas.

El debut Panamericano de Richardson se produjo en San Juan, en 1979 y allí ganó su primer título. Cuatro años más tarde, en el duelo por el oro, Canadá superó a Estados Unidos; pero, después, las estadounidenses recuperaron el dominio y Richardson añadió tres coronas más, en las citas de Indianápolis, 1987, Mar del Plata, 1995 y Winnipeg, 1999.

Richardson también brilló en los Juegos Olímpicos. En el debut de este deporte en citas estivales, en Atlanta 1996, ella conectó un jonrón en el partido decisivo, contra China, que contribuyó al triunfo de su equipo. Luego, Richardson también compitió en la Olimpiada de Sídney, en la que Estados Unidos retuvo la corona.

Richardson fue exaltada al Salón de la Fama del softbol de Estados Unidos en 2006.

Denise Parker. Tiro con arco

Denise Parker fue considerada la mejor arquera de Estados Unidos en las últimas dos décadas del siglo XX. Su debut internacional ocurrió en los Panamericanos de Indianápolis, en 1987, cuando solo tenía 13 años. Allí, aquella niña, que lanzaba a la zurda, sorprendió a todos, al ganar la final individual.

En su segunda participación Panamericana, en La Habana, Denise—quien ya era una experimentada arquera, incluso con una medalla olímpica, en la cita de Seúl, 1988—mantuvo su dominio en la competición individual y volvió a ganar el título con la selección de su país; además, subió a lo más alto del podio a las distancias de 30, 60 y 70 metros (estas modalidades ya desaparecieron del programa competitivo de los Panamericanos).

Parker fue la reina panamericana del tiro con arco hasta la cita de Winnipeg, en 1999. En sus cinco participaciones conquistó 15 preseas, divididas en 12 de oro, dos de plata y una de bronce. En la lista de las deportistas con más medallas en Juegos Panamericanos, Parker aparece en la segunda posición, solo superada por Joanne Malar.